Desde el Centro Científico CEAZA indican que estas precipitaciones ayudan en una pequeña proporción en el contexto de crisis hídrica. La situación sigue siendo compleja ya que los embalses y caudales de ríos se mantienen en niveles muy bajos.
En concordancia con el pronóstico realizado por el Centro Científico CEAZA, los montos de las últimas precipitaciones fueron modestos. De acuerdo a Cristian Muñoz, modelizador estadístico del Centro Científico CEAZA, “las máximos que se registraron durante el evento ocurrieron principalmente en la provincia de Limarí durante la noche del martes y madrugada del miércoles, registrándose 5.8 mm en laguna Hurtado y 4.4 mm en Los Molles. Mientras que en otros sectores precordilleranos no superaron 1 mm”.
En cuanto a las esperadas precipitaciones de nieve, el profesional detalla que “en el embalse La Laguna (provincia de Elqui), en total el evento acumuló 7 cm de nieve allí, la que se ha ido derritiendo en horas posteriores, por ejemplo con fecha 2 de septiembre a las 7 am se registraron 4.8 cm. En la estación meteorológica Casa del Canto (provincia de Choapa) llegaron a acumularse 32 cm de nieve, quedando unos 22 cm a las 9 am del 2 de septiembre”.
¿Ayudan estas precipitaciones?
En relación a si estas últimas precipitaciones contribuyen a superar la actual crisis hídrica que vive la Región de Coquimbo, Cristian Muñoz, modelizador estadístico del CEAZA declara que “efectivamente ayuda, pero en una proporción tan menor que seguimos enfrentando un escenario difícil de disponibilidad de agua. Durante el mes de agosto varias estaciones recibieron menos de 2 mm de agua, particularmente en Limarí y Elqui, lo que hace que el escenario sea particularmente complejo. Sin embargo, aún queda temporada, por lo que hay que esperar que pasará durante septiembre”.
Cristian Orrego, coordinador del área meteorológica del CEAZA indica que “el estado actual de los embalses y caudales en los ríos es bajo, han estado en disminución desde el 2018 dadas las precipitaciones bajo lo normal registradas desde ese año en adelante”.
“Las precipitaciones del 2021 nuevamente han sido escasas y los valores actuales indican un déficit regional que está en el rango del -58% a -93%. Esto significa que en promedio este año ha precipitado en torno a un 20-25% de lo que se espera para un año normal, y además estos valores son aún menores a los registrados durante el 2020 y en términos de la sequía ya es el cuarto año con precipitaciones muy bajas”, recalca el profesional del CEAZA.