Investigadores CEAZA colaboran en proyecto de desarrollo de bioinsumos para mejorar cultivos en Latinoamérica

Al crecer la población mundial, aumenta la demanda de alimento. En consecuencia, se ejerce una presión considerable sobre los recursos naturales. 

Los métodos agrícolas tradicionales, basados en el uso de agroquímicos, enfrentan problemas de sostenibilidad tanto en términos ambientales como económicos. Por lo tanto, surge la necesidad de nuevas tecnologías más sostenibles. En este contexto, varios investigadores de Latinoamérica han comenzado a buscar una alternativa: los bioinsumos.

“El uso de bioinsumos en la agricultura es una solución biotecnológica que permite reducir el uso de agroquímicos en la producción agrícola y con eso también, en el fondo, la carga de químicos que a través de los alimentos nosotros ingerimos”, señala la Dra. Alexandra Stoll, investigadora de CEAZA y líder de proyecto.

La “Plataforma para la transferencia y uso eficiente de bioinsumos en fincas de América Latina” se desarrolla entre el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA) junto a científicos de Argentina (INIAB-UNRC, IPAVE-INTA), Colombia (AGROSAVIA) y Uruguay (IIBCE, INIA, FAgro-UdelaR), financiado por FONTAGRO y el Ministerio de Industrias Primarias (MPI) de Nueva Zelanda. El Dr. Máximo González, investigador de CEAZA, también colabora.

Dicha iniciativa estudia los bioinsumos: biofertilizantes, biopesticidas y biocontroladores que se basan en microorganismos beneficiosos para la agricultura. Estos tienen un impacto importante, ya que son más amigables con el medio ambiente que los productos tradicionales.

Bioinsumos: biofertilizantes, biopesticidas y biocontroladores.

“También el uso de bioinsumos permite mejorar el contenido nutricional de muchos de los cultivos en cuanto a, por ejemplo, sustancias antioxidantes o mejor calidad de la fruta en cuanto a sabores, dulzor, etcétera, según el cultivo”, destaca la investigadora de CEAZA.

Lo que busca el proyecto

La Dra. Stoll explica que hay 3 objetivos principales dentro del proyecto. En primer lugar, generarán material de apoyo para productores agrícolas de los distintos países participantes.

“Nuestra idea es realizar ensayos con cepas de cada uno de los laboratorios, en cultivos de interés para cada uno de los países, y a raíz de esta experiencia, en conjunto con los productores, generar un manual que tenga información acerca del manejo integrado con bioinsumos en campo. Vamos a hablar de las dosificaciones, incorporar temas acerca de aplicaciones o repetir aplicaciones, acerca de las compatibilidades de estos bioinsumos con otros manejos agrícolas como manejo fitosanitario u otros que puedan ocurrir, y también a cómo distinguir la calidad de un bioinsumo basado en microorganismos”, indica.

En segundo lugar, la Dra. Stoll comenta que “condensar o consolidar conocimiento de la caracterización de las cepas para el desarrollo de bioinsumos en el mundo empresarial, donde vamos a dar una serie de recomendaciones acerca de distintos métodos de caracterización de los bioinsumos a nivel de laboratorio de las diferentes cepas, también acerca de cómo se pueden generar consorcios y poder entregar herramientas para la validación de eficiencia de estos bioinsumos en el manejo en campo”.

“Nuestra idea es realizar ensayos con cepas de cada uno de los laboratorios, en cultivos de interés para cada uno de los países”, señalaba la Dra. Stoll.

Además, la información generada servirá para el tercer objetivo: orientación para los tomadores de decisión en cuanto al desarrollo de reglamentos o regulaciones vinculados a este mercado de bioinsumos.

A pesar de su potencial, la adopción de estas biotecnologías presenta desafíos importantes. Su eficacia, aplicación y la complejidad de los procesos de registro para su uso comercial son algunos de los obstáculos que deben ser superados. Para hacer frente a estos retos, los investigadores comparten sus avances en conjunto desde los distintos laboratorios comprometidos.

Este esfuerzo marca un paso importante hacia el futuro de la agricultura, demostrando que la innovación y la sostenibilidad pueden ir de la mano para enfrentar los desafíos del siglo XXI. Más información en: https://www.fontagro.org/new/proyectos/plataforma-bioinsumos/es

 

El Consorcio CEAZA está integrado por el Gobierno Regional, Universidad de la Serena (ULS), Universidad Católica del Norte (UCN), el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) y el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA).