El estudio también sugiere que el avance hacia la Antártica del Anticiclón del Pacífico Sur, por efectos del cambio climático, limitaría la reserva de agua en la Cordillera de Los Andes del Norte Chico.
Un reciente estudio publicado sobre la historia de la acumulación y disminución de nieve y hielo (balance de masa) en el glaciar Guanaco, en la Región de Atacama, comprueba que la acumulación de agua en estado sólido en estos reservorios está disminuyendo, y resalta la gran susceptibilidad de estos cuerpos de hielo y nieve a la falta de precipitación.
El trabajo establece que una de las principales razones de la situación sería el avance hacia el sur del Anticiclón del Pacífico Sur, masa gigante de aire, que se proyecta desde Perú hacia la Antártica. El Anticiclón, cuya influencia cruza gran parte de Chile hasta aproximadamente XI Región, obstruye el paso de los sistemas de precipitaciones en la zona, efecto que es especialmente notorio en el norte del país.
Entre otras actividades el estudio implicó la toma de un testigo de hielo de 113 metros de largo, desde la roca madre del Glaciar Guanaco. La muestra fue útil para verificar la posibilidad de acumulación de agua subglacial y el riesgo asociado al colapso del glaciar, junto a la reconstrucción de la historia del clima reciente del área.
Retroceso del glaciar
El análisis, que abarca desde el año 1900 al 2015, se realizó a partir de observaciones glaciológicas, meteorológicas, paleoclimáticas, entre otras en el Glaciar Guanaco, uno de los más grandes de esa zona del Norte Chico de Chile, con cerca de 1.8 km2, el que mostraría un retroceso de alrededor de 0.334 km2 entre el año 1955 y 2007 (52 canchas de fútbol, aproximadamente).
“En particular, las precipitaciones muy bajas y la pérdida de masa por sublimación (paso de estado sólido directo al gaseoso), dos procesos importantes en glaciares de zonas áridas, provocarían una respuesta distinta de los glaciares nortinos frente al cambio climático, en comparación a los de zonas templadas del sur de Chile”, explica el Dr. Christophe Kinnard, investigador de la Universidad de Quebec, Canadá, y autor principal del estudio.
El investigador plantea que si bien se disponen de muy pocos datos de la pérdida y aumento de masa a largo plazo de los glaciares en el Norte Chico, los otros glaciares del sector donde se realizaron las mediciones desde el año 2005, muestran pérdidas similares a las de Guanaco, pese a que la tendencia histórica es desconocida.
“El testigo de hielo sacado en el Glaciar Tapado, en la Región de Coquimbo en 1999, reveló que el glaciar sufrió un periodo prolongado de ablación que resultó en pérdida de hielo en la cumbre, pero la acumulación se reinició en 1920 y duró hasta cuando se sacó el testigo. En nuestro estudio mostramos que la superficie del glaciar Guanaco también tuvo un periodo prolongado de ablación, pero que a contrario de El Tapado, no hubo un reinicio de acumulación. Un aspecto que lo comprobaría es que su superficie actual tienen un edad de más de cien años”.
Pérdida y ganancia, entre el Anticiclón y El Niño
En el estudio, los científicos correlacionaron la pérdida y acumulación de hielo y nieve del Glaciar Guanaco y dos indicadores climáticos: El Niño, y el ‘Southern Annular Mode – SAM’ u ‘Oscilación Antártica’. Ambos controlan la variabilidad de las precipitaciones en la zona. La correlación más fuerte encontrada fue la de El Niño, es decir, con la presencia de este último se generarían más precipitaciones y, por lo tanto, aumento de masa en el glaciar.
“Entonces, hay una cierta concordancia entre la dinámica de El Niño y los periodos de balance de masa. Sin embargo, lo que proponemos es que la tendencia subyacente hacia una pérdida de masa se vincula al desplazamiento de la celda de alta presión del Pacifico hacia el Sur (Anticiclón del Pacífico Sur), lo cual resulta en el bloqueo de las masas de aire húmedo del Pacifico en invierno”, plantea Kinnard.
Si bien los datos conocidos sobre diversos tipos de glaciares en la zona indicarían que en diferente medida están disminuyendo en masa, el especialista señala que en los más grandes, como Guanaco, las tasas de balance de masa, aunque negativas, son pequeñas, lo que podría retardar su derretimiento completo en algunas décadas. “No hemos intentado proyectar el futuro de este glaciar, lo que necesitaría un estudio de modelamiento dedicado a esto”, añade.
Para el investigador, la nueva información del estudio agrega evidencia sobre el efecto de la ‘expansión de las zonas subtropicales secas’ sobre la zona Norte de Chile.
“Aunque los glaciares en esa zona representan sólo una parte de la contribución de recursos hídricos, los resultados implican una reducción de almacenamiento nival para la región en el futuro, con efectos adversos sobre la disponibilidad de agua”.
Junto con el Dr. Kinnard, contribuyeron a esta labor científica los doctores Patrick Ginot (Universidad de Grenoble-Alpes, Francia), Arzhan Surazakov (CEAZA), Shelley MacDonell (CEAZA), Lindsey Nicholson (Universidad de Innsbruck, Austria), Nicolas Patris (Universidad de Montpellier, Francia), Antoine Rabatel (Universidad de Grenoble-Alpes, Francia), Andrés Rivera (Universidad de Chile), Francisco Squeo (ULS-IEB-CEAZA).