Parte de la investigación “Fundamentos oceanográficos y biológicos para la planificación y el diseño de plantas desalinizadoras en el centro-norte de Chile”, desarrollada por el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA) y liderada por el Dr.Víctor Aguilera, fue dada a conocer a investigadores, expertos, académicos, estudiantes, y representantes de entidades públicas y privadas en el seminario “Plantas desaladoras en Chile: conocimiento, oportunidades y desafíos” organizado por la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Valparaíso, a través de la Escuela de Ingeniería Oceánica, y el Grupo de Contaminación Marina del Comité Oceanográfico Nacional (CONA).
El proyecto, financiado por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) a través del Fondo de Investigación Estratégica en Sequía, considerará variables del océano a tomar en cuenta a la hora de proyectar una planta desalinizadora. De acuerdo al Dr. Orlando Astudillo, investigador de CEAZA e integrante de la iniciativa, resulta esencial tomar en cuenta la presencia de especies marinas en los posibles sitios de ubicación de plantas desaladoras.
“Las consideraciones en base a los resultados de los estudios de circulación oceanográfica e impacto del vertido de salmuera a lo largo de la costa de la región de Coquimbo indican que los lugares candidatos para la instalación y funcionamiento de una planta deben cumplir dos condiciones, la primera es evitar la ubicación de torres de captación de agua de mar en sectores de las costa que presenten alta concentración de biomasa fitoplanctónica o retención de organismos marinos transportados por las corrientes y que puedan ser colisionados o succionados en la toma de agua. Y en segundo lugar, debe contemplarse que para la instalación de los emisarios de salmuera, deben privilegiarse aquellos emplazamientos donde el régimen de circulación y dispersión presente máximos locales de modo de diluir en menor tiempo la descarga de salmuera y evitar el desarrollo y mantenimiento de anomalías salinas por sobre lo observado naturalmente “, plantea el Dr. Astudillo.
El Dr. Patricio Manríquez, investigador de CEAZA y también miembro del equipo de investigación detalla que “nuestro estudio evaluó en condiciones controladas de laboratorio el efecto de la exposición en estadios sensibles del ciclo de vida de organismos característicos de nuestro maritorio a salmueras y salmueras diluidas producidas por plantas desaladoras en operación que producen agua potable o parta actividades mineras a través de osmosis reversa”.
“La operación de una planta desaladora tiene dos componentes desplegados en el mar. El primer componente es un sistema que capta y moviliza el agua desde el mar hasta las instalaciones en tierra que transforma dicha agua en agua de mar apta apara su consumo o para otras actividades tales como la minería y agricultura. Al ser un sistema que capta agua desde el mar, existe el riesgo de que larvas o pequeños ejemplares de invertebrados o peces sean mecánicamente succionados. El segundo componente es un sistema constituido por un ducto y una serie de difusores desplegados que vierten en el mar el residuo que genera proceso de la osmosis reversa, residuo que es una solución de agua de mar con una salinidad mayor a la del agua de mar normal . En consecuencia, en el entorno cercano a estos difusores, los organismos marinos potencialmente podrían estar expuestos a salinidades anómalamente elevadas, lo que probablemente mate o estrese a los organismos”.
“Existen muchos estudios que han evaluado los efectos de la salmuera provenientes de plantas desaladoras en organismos marinos, sin embargo, en el marco de este seminario, expuse datos recientemente obtenidos por un equipo de investigadores del CEAZA en el marco del Proyecto SEQUÍA. Los resultados obtenidos en este proyecto son los primeros obtenidos en Chile para evaluar los potenciales efectos de estas salmueras en pequeños locos, machas y huiros. Todas especies con gran importancia económica, ecológica y social para Chile”.
Foco local
La investigación hace proyecciones y modelaciones respecto a los efectos de las plantas desaladoras en el medio marino de las costas de la Región de Coquimbo. El Dr. Orlando Astudillo indica que “en base a las observaciones y modelos hidrodinámicos, la región de Coquimbo presenta una circulación de mayor intensidad al sur de Puerto Aldea, sin embargo también se identifican localidades con menor circulación en este margen dependiendo de su ubicación en relación con la geometría costera (áreas expuestas o bahías), lo anterior destaca la importancia de efectuar mediciones y modelamiento hidrodinámico previo tanto en los sectores candidatos de captación de agua como de vertido de salmuera para asegurar que las anomalías salinas de la planta en funcionamiento no excedan los niveles observados naturalmente a lo largo del ciclo anual”.
“Como recomendación general para el vertido de salmuera, se sugiere la implementación de tecnologías de descarga, como difusores de flujo de última tecnología o la dilución previa del agua de descarte con agua de mar. Lo anterior, en base a observaciones y modelos, restringe las anomalías de salinidad a los primeros metros de los emisarios inhibiendo su extensión espacial y su efecto negativo en el ecosistema marino”, recomienda en base a la investigación el Dr. Astudillo.