A fin de generar iniciativas que contribuyan a que la Región de Coquimbo se adapte a la crisis hídrica, se formaron mesas de trabajo y se realizaron visitas técnicas que evidenciaron la compleja realidad de la zona, asimismo, se conoció in situ pilotos de proyectos que han sido exitosos y que podrían replicarse en otros lugares.
Con el propósito de generar acciones concretas en torno a soluciones en el contexto de la crisis hídrica, se reunieron los principales representantes de diversos sectores de la sociedad de la Región de Coquimbo junto a científicos y especialistas en la gestión del vital elemento, quienes trabajaron para identificar problemáticas, y lo más importante, alternativas que contribuyan al uso eficiente del agua en medio de este complejo escenario. En este contexto, visitaron proyectos científicos y tecnológicos en Gualliguaica, Alfalfares, Pan de Azúcar y el sector costero de Coquimbo.
Pablo Álvarez, director de Laboratorio PROMMRA de la Universidad de La Serena y del Consorcio Tecnológico del Agua Quitai Anko (CTQA) detalla que “nos reunimos con un grupo de personas que son representantes de diferentes sectores y usuarios del agua clasificados en usos agrícola, ambiental, minero, industrial y para consumo humano. El motivo principal de este encuentro era preguntarles cómo desde la academia, desde la ciencia y tecnología y desde la formación a nivel de pre grado, postgrado y niveles técnicos, se puede contribuir a resolver o avanzar en los temas que tienen que ver con la crisis hídrica que estamos viviendo”.
Respecto a las múltiples vías de soluciones propuestas en las mesas de trabajo realizadas en el marco del Workshop “Desafíos y oportunidades de la crisis hídrica en territorios áridos”, Hans Van Duijne, asesor estratégico internacional en Deltares y académico de la Universidad de Wageningen planteó que “la tendencia es que desalinizar el agua es el último sistema de tecnología y entre medio tienes que pensar un ‘tren’ de tecnologías. Un ‘tren’ en el sentido de que por ejemplo, pueden también reutilizarse aguas residuales para riego y para eso no sería necesario tratar agua salina porque es un proceso caro. Tenemos un área agrícola en Pan de Azúcar (comuna de Coquimbo), por citar un lugar y dos plantas de tratamiento que vierten 400 litros por segundo de agua directamente al mar en La Serena y Coquimbo, estos 400 litros por segundo es bastante agua y si la minería o la agricultura pueden usar esta agua, ellos no requerirían agua subterránea”, comentó.
Cabe destacar que el workshop fue organizado por la Universidad de La Serena, el Reino de los Países Bajos, el Centro de Estudios Avanzados de Zonas Áridas (CEAZA), la Corporación Regional de Desarrollo Productivo (CRDP), Deltares y el Consorcio Centro Tecnológico del Agua Quitai Anko (CTQA). Dy¿uanrante el evento se dio a conocer data científica especializada para la Región de Coquimbo sobre el recurso hídrico además de presentar soluciones tecnológicas a las problemáticas del agua en ciudades, como el proyecto de ciencia aplicada Aqua Connect del Instituto Deltares de Países Bajos.
Cultura del agua
Claudio Vásquez, gerente corporativo del CEAZA destaca el aporte de la ciencia para que en su conjunto la ciudadanía conozca la realidad que experimenta la región y actúe en concordancia con el territorio árido en el que habita. “Junto con la investigación científica, nuestro Centro CEAZA tienen como propósito crear conciencia a partir del conocimiento científico que generamos, para entender que la compleja situación que vivimos no corresponde a un periodo limitado de tiempo como es el caso de una sequía o escasez hídrica, sino que corresponde a un fenómeno más de largo plazo que corresponde a una aridización de nuestra Región de Coquimbo, por lo tanto todas las conductas que tengamos los ciudadanos deben ser coherentes con esta realidad”.
Una de las alternativas que se han explorado para gestionar el agua en el marco de este proceso de aridización que afecta al territorio, es el piloto ejecutado por INIA Intihuasi en su parcela experimental ubicada en Pan de Azúcar, donde ya se está avanzando para contribuir al almacenamiento de agua en el acuífero subterráneo del sector. Francisco Meza, investigador especialista en recursos hídricos de INIA explica que “esta unidad de estudio del acuífero del sector de Pan de Azúcar forma parte del programa colaborativo que hay entre la Región de Coquimbo y los Países Bajos y lo que estamos ejecutando es la prueba de los estudios previos donde realizamos el diseño de un programa de inyección de agua al acuífero de manera. Es un proyecto FNDR financiado por el Gobierno regional de Coquimbo y lo que vamos a hacer es hacer las pruebas de ensayo para inyectar agua al acuífero subterráneo”.
Finalmente, otro de los sitios visitados fue la localidad de Gualliguaica en el Valle de Elqui, donde se ejecuta el Proyecto de aguas residuales tratadas, una de las líneas de desarrollo del CTQA, donde Christopher Vivanco, Mg. Ing. Agrónomo de CAZALAC, explicó que “uno de los objetivos de la gira que se realizó fue conocer los beneficios de la reutilización de agua tratada como una fuente alternativa para superar todas las complejidades hídricas que tiene la Región de Coquimbo y que, en este caso, ha sido utilizada con éxito para el riego de frutales. La idea es replicar este tipo de proyectos para tener beneficios no sólo ambientales, sino que también sociales y económicos”
La visita desempeñó un papel fundamental en la identificación de las problemáticas en torno a la crisis hídrica presentada durante la primera jornada. Asimismo, se destaca la colaboración entre distintos sectores y expertos, quienes trabajaron en la formulación de propuestas concretas, que van desde la reutilización de aguas residuales hasta la implementación de proyectos tecnológicos innovadores que posibiliten una gestión sostenible del agua en la región de Coquimbo.