Con la participación de los doctores Marcel Ramos (CEAZA), Beatriz Yannicelli (CEAZA), Javier Sellanes (UCN-CEAZA) y la profesional María Valladares (CEAZA) se efectuó, durante dos semanas, la tercera campaña del Núcleo Milenio Ecología y Manejo Sustentable de Islas Oceánicas (NM-EMSIO), dirigido por el Dr. Carlos Gaymer (UCN-CEAZA). En la oportunidad los investigadores realizaron instalación de instrumentos para mediciones oceanográficas físicas en las costas de la Isla, un monitoreo biológico que incluyó muestras de agua y plancton. Además, efectuaron estudios de los organismos que viven asociados al fondo marino (fauna bentónica). Los científicos aseguran que para toda esta labor fue fundamental el apoyo de pescadores locales y de la Armada de Chile.
El trabajo de campo se llevó a cabo en zonas alejadas de la costa, a más de 150 m de profundidad, tradicionalmente utilizadas para la pesca por la comunidad Rapa Nui.
“Buscamos conocer la variabilidad de las condiciones oceanográficas y biológicas cercanas a la isla y de montes submarinos del sector. De esta manera, podemos entender la dinámica oceanográfica del lugar, que sabemos es muy distinta a la de las costas en el continente. Y, a su vez, entender porqué esos lugares determinados son productivos”, explica Ramos.
El especialista considera que este trabajo pone un desafío, en términos de aprendizaje de mecanismos que podrían estar afectando a esta zona del Pacífico Sur-Este y, al mismo tiempo, una oportunidad de explicar la conectividad entre procesos que ocurren en Rapa Nui y los de la costa de Chile.
Equipamiento
En la expedición se instalaron sensores de temperatura y oxígeno, junto a un perfilador de corriente, todos ello para generar una serie de tiempo que pueda explicar procesos naturales que ocurren en las costas de la Isla. Se espera rescatar estos elementos en marzo del próximo 2015.
Una de las herramientas utilizadas para los monitoreos fue el Remotely Operated Vehicule (ROV). Este vehículo, perteneciente a la ONG Oceana y operado por el especialista Matthias Gorny, tiene la capacidad de grabar video en alta resolución hasta profundidades de 600 m para reconocer las especies que viven en el fondo marino. Sus movimientos así como los de sus cámara e iluminación son manejados por un operador desde una embarcación.
“Debido a las malas condiciones del mar durante la semana que nos tocó utilizar el equipo solo pudimos llegar hasta 280 m, pero la idea es hacer intentos más profundos en futuras oportunidades”, señala Javier Sellanes.
Oasis submarino
Sellanes explica que las muestras obtenidas en su labor requieren un mayor análisis, pero en principio “se pudieron observar muchas especies, sobre todo peces no reportados para la Isla”, asegura.
Marcel Ramos aclara que las diferencias entre ese sector del océano donde se encuentra la Isla de Pascua y la costa de Chile están dados por elementos como la surgencia costera, que es importante en la costa y que las enriquece con el afloramiento de aguas desde el fondo del mar rica en nutrientes. En cambio, las condiciones en la Isla de Pascua están dominadas por una condición de giro subtropical en los vientos, con menor presencia de biomasa y fitoplancton en el fondo marino.
“La Isla misma y los montes submarinos son oasis en este giro subtropical del Pacífico Sur. Por algunos fenómenos físicos, junto a los montes submarinos se genera una mayor productividad. La idea nuestra es entender estos mecanismos físicos y biológicos alrededor de la Isla y de los Montes submarinos cercanos”.
Acercamiento a la comunidad y extensión
Según Ramos esta fue la primera aproximación a la Isla del grupo de trabajo oceanográfico del proyecto, por lo que asegura fue un proceso fue más de aprendizaje, de cómo funciona la Isla y qué cosas realmente se podían hacer, con el apoyo de la comunidad local.
“Realizamos un acercamiento con ellos para saber, por ejemplo, en qué lugares nos podíamos instalar. Por esta razón tuvimos que modificar un poco nuestros planes, pero finalmente nos concentramos en la misma Isla de Pascua”.
Sellanes agrega que si bien hubo alguna incomodidad en cierta parte de la comunidad al comienzo por el trabajo que efectuarían, percibe que finalmente les resultó interesante.
“Creo que quedaron bien impresionados con los resultados. Ellos hace decenas de años que pescan en esa zona y nunca habían tenido la oportunidad de ver, mediante videos, que era lo que estaba sucediendo ahí abajo”, afirma.
Dentro de las actividades de extensión en la Isla del grupo científicos, Marcel Ramos fue entrevistado en la Radioemisora Manukena sobre tsunamis, el mismo 8 de octubre en que se generó un sismo 7.1 grados richter en el mar, al Sur de la Isla. Además, presentó una charla del mismo tema en la Escuela Particular Nº 371.
EMSIO
El área de estudio del proyecto abarca tanto las Islas Sala y Gómez como Pascua. Uno de los objetivos importantes del proyecto es entender la conectividad física y biológica entre estos dos sistemas. Además, propone determinar los patrones y procesos que explican la biodiversidad de esa región e identificar los factores que la amenazan.
A través de un proceso participativo los encargados del proyecto elaborarán una estrategia de manejo basada en la comunidad para los recursos y ecosistemas marinos de Isla de Pascua. En este Núcleo además participan los doctores (CEAZA), Martin Thiel (UCN-CEAZA), Guillermo Luna (UCN-CEAZA, investigador responsable suplente del proyecto), Enzo Acuña (UCN), David Véliz (UChile-IEB).
Leave a Reply