Será una actividad abierta al público que tendrá lugar en el Salón del Museo Arqueológico de La Serena (Cordovez esquina Cienfuegos), el día jueves 12 de abril a partir de las 11:00 horas.
“La Divina Comida” es el título de la charla a cargo del Dr. Ignacio Jara, investigador del laboratorio de Paleoecología del CEAZA, quien expondrá parte del trabajo científico que ha estado desarrollando en conjunto con equipo de arqueólogos del sitio El Olivar y el Museo Arqueológico de La Serena.
Se trata de una investigación científica efectuada en un periodo aproximado de cuatro meses, que fue posible gracias a la adjudicación del proyecto “Recuperación e identificación de material vegetal prehistórico del sitio arqueológico El Olivar, La Serena”, financiado por el fondo cultural Región de Coquimbo 2017 otorgado por el Gobierno Regional.
El Dr. Jara, ejecutor de la iniciativa, indica que la presentación tendrá dos etapas, una donde se revisará qué es lo que se sabe de las culturas alfareras, y luego, se introducirán al proyecto en el sitio El Olivar. “Contaremos su importancia, los resultados del proyecto, las discusiones y cuáles son las futuras líneas a seguir”.
“Queremos mostrar qué se hizo y cuáles fueron los resultados del trabajo y explicar también cuál es el aporte del CEAZA a través de este proyecto para un mejor entendimiento de la historia de los pueblos ancestrales de la región”, sostiene.
El polen para entender la prehistoria
El proyecto consistió básicamente en identificar granos de polen presentes en el interior de las vasijas ceremoniales de los entierros del sitio. Dicho lugar ha sido denominado como una “gran necrópolis”, es decir, un cementerio enorme que aún, no ha sido desenterrado, en gran parte.
“Lo que se observó fue una diversidad de plantas, buscando con ello conocer cuál fue el uso de estas en los contextos fúnebres, ceremoniales o en las ofrendas que se entregaban a los muertos de las culturas Diaguitas y Ánimas que son las encontradas en el lugar”, señala el investigador.
Detalla que el objetivo del procedimiento es conocer las especies de plantas y el contexto en que pudieron ser ofrendadas, por ejemplo, como plantas medicinales o alimento… de ahí el nombre de la charla”.
La edad exacta del polen extraído desde las vasijas aún es desconocida, pero se está a la espera de los resultados de las dataciones radiocarbónicas que arrojen los análisis de laboratorios en Estados Unidos, que demorarán un tiempo.
En esta línea, el Dr. Jara explica que “lo que se conoce, son los contextos fúnebres, que pertenecen a las culturas denominadas Las Ánimas y Diaguita que poblaron esta zona entre los años 800 y 1500, después de Cristo”.
“Más o menos como en la Edad Media, cuando Europa estaba sumergida en la edad oscura, en estos valles de la Región de Coquimbo, florecían culturas que se caracterizaban por ejecutar una alfarería muy fina, con patrones geométricos, se trataba de culturas bastantes sofisticadas”, puntualiza.