Según informa el reporte mensual del área de meteorología y climatología CEAZA, los modelos sobre El Niño – Oscilación del Sur (ENOS) para este mes indican que su condición actual cambia ligeramente respecto del trimestre pasado. La tendencia, ahora positiva, indica desarrollo de una fase débil para el presente trimestre.
“A pesar de las condiciones, la magnitud que vaya a tener el presente Niño permanece incierta”, se señala en el documento.
A partir del presente trimestre (junio, julio, agosto), tanto en los modelos dinámicos como los estadísticos, se observaría la probabilidad superior al 50% de que el desarrollo de un evento El Niño, de carácter débil, se presentará desde junio. Por ahora en los modelos se visualiza que este evento estaría latente hasta fines del año 2014.
“Por ejemplo, para lugares como La Serena y Coquimbo, debiesen caer algo más de 60 mm que es el promedio anual en ese sector de la Región de Coquimbo”, explica Cristóbal Juliá, meteorólogo del CEAZA.
A su vez el profesional hace hincapié en que las diferencias entre los datos de precipitaciones que las diferentes instituciones del área informan al público para la zona, entre ellas la Dirección General de Aguas, la Dirección Meteorológica de Chile y el CEAZA, se deberían a que cada una de ellas cuenta con estaciones en lugares distintos, evidencia de una “gran variabilidad meteorológica y no de un error en los datos”, advierte.
Los especialistas del CEAZA sugieren mantener una postura cauta frente a la probabilidad de precipitaciones para este invierno, ya que este escenario no sugiere un cambio en las condiciones actuales de sequía para la Región de Coquimbo.
Estado de caudales y embalses
El boletín también da cuenta del estado de los caudales de los ríos. El Río Elqui posee un 37% y Choapa un 49% del promedio histórico (datos calculados desde 1980). En tanto, el Río Limarí tiene un 44% del promedio histórico (datos calculados desde 1982).
En marzo los embalses Cogotí y Recoleta se quedaron sin agua. Puclaro presenta un 4,6% del total de su capacidad, mientras que La Paloma tiene un 2.4% de agua embalsada. Actualmente, el volumen de agua total embalsada en la región corresponde a un 5% de la capacidad de la región.
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